Cuidando a nuestros cuidadores
Reconocer esta función puede ayudar a los cuidadores a recibir el apoyo que necesitan.
A medida que la población envejece, cada vez son más las personas que, sin ser profesionales de la salud, proporcionan cuidados a familiares o amigos cercanos. De acuerdo con datos dados a conocer por la Clínica Mayo, aproximadamente 1 de cada 3 adultos en los Estados Unidos brinda cuidado a otro adulto como cuidador informal.
Un cuidador informal brinda ayuda a alguien, ya sea un cónyuge o pareja, un hijo discapacitado o un miembro de la familia, que necesita ayuda para completar las actividades de la vida diaria. Los familiares que cuidan activamente a un miembro de la familia a diario no se consideran a sí mismos como cuidadores. Más bien, ven como una obligación familiar cuidar de aquellos que no pueden valerse por sí mismos.
Tal es el caso de María, quien tuvo que hacerse cargo del cuidado de su madre quien, debido a su avanzada edad, cerca de los noventa años y con un diagnóstico de Alzheimer, no era capaz de realizar por si misma sus actividades básicas diarias como vestirse, alimentarse e inclusive requería de la ayuda de su hija para su aseo personal.
Y es que, de acuerdo con María, la “responsabilidad” de hacerse cargo de otra persona es una función difícil de llevar a cabos hasta para la propia salud del cuidador, comentó María, quien dijo que en alguna ocasión al intentar cargar a su madre para ayudarla a vestirse sufrió una lesión en la espalda misma que la limitó para sus actividades normales.
“Cuando uno se hace cargo de una familiar no tiene ni idea de cómo hacerlos, es más bien un acto de amor el cuidar a ese ser querido que requiera de uno para sobrevivir”, dijo María. “Además es también muchas veces muy difícil el tener que informar a los hermanos sobre el estado de salud de la persona que cuidamos, ellos muchas veces quieren escuchar buenas noticias, pero es difícil cuando esa persona se va deteriorando poco a poco”, comentó.
Estresante pero gratificante
Cuidar a personas enfermas puede tener muchas recompensas. Para la mayoría de los cuidadores, estar presente cuando un ser querido te necesita es un valor fundamental y algo que se desea dar.
Pero es casi seguro que ocurra un cambio de roles y emociones. Es natural sentirse enojado, frustrado, exhausto, solo o triste. El estrés del cuidador, el estrés emocional y físico del cuidador, es común, ya que los cuidadores que experimentan estrés pueden ser vulnerables a cambios en su propia salud.
Como cuidador, se pudiera estar tan concentrado en su ser querido que se puede descuidar su propia salud y bienestar. Sufrir mucho estrés, en especial, por mucho tiempo, puede perjudicar la salud del cuidador.
Como cuidador, se tienen más probabilidades de presentar síntomas de depresión o de ansiedad. Además, es posible que no duerma ni se ejercites lo suficiente, ni lleves una alimentación equilibrada; esto aumenta el riesgo de tener problemas de salud, como enfermedades cardíacas y diabetes.
La práctica no hace la perfección
Las demandas emocionales y físicas que surgen de cuidar a alguien pueden causar estrés incluso al cuidador más resiliente, por lo que es necesario aprovechar todos los recursos y herramientas disponibles para ayudar. Es importante aprender a aceptar ayuda.
Los expertos en cuidados recomiendan hacer una lista de actividades que otros pueden hacer para ayudar a cuidar a un ser querido. Por ejemplo, un amigo podría proporcionar transporte seguro y confiable para que un ser querido llegue a las citas médicas. Otros miembros de la familia podrían hacerse cargo de los alimentos, ir de compras o proporcionar comidas para aliviar algunas de las responsabilidades del cuidador.
Hay también que tener en mente que es normal sentir culpa, pero hay que ser realistas y entender que no existe el cuidador “perfecto”. Piense usted que se está haciendo lo mejor que se puede y tomando las mejores decisiones posibles en todo momento.
“Cafecito Time con Equality Health” alivia el estrés
Si usted es un cuidador o conoce a alguien que cuida a un ser querido, únase a nosotros en el “Cafecito con Equality Health” este jueves 23 de septiembre al mediodía y a la 1 de la tarde. Al sintonizar este seminario virtual, tendrá la oportunidad de aprender más sobre la difícil tarea de un cuidador y los recursos comunitarios que ofrecen apoyo a la familia.
Como siempre, María Rebozo-La Pine actuará como moderadora del “cafecito”, su invitada será Bianca Martínez Raymond, quien es trabajadora social, educadora, psicología y experta en la labor de los cuidadores. Martínez Raymond compartirá ideas invaluables sobre cómo manejar los desafíos de la prestación de cuidados y cómo experimentar más plenamente las recompensas de esta tarea.
La reunión virtual estará disponible en español e inglés a través de Zoom y Facebook Live. Para registrarse en este muy informativo “Cafecito Time con Equality Health”, visite www.equalityhealth.com/cafecito-es.
Publicado en Prensa Arizona, 9/9/2021